Me encanta mi trabajo como fotógrafo de bodas y hace unas semanas he tenido la oportunidad de saltar a esta divina tierra de Villanueva, para capturar este íntimo enlace. Trabajar como fotógrafo en Asturias fue una experiencia única y es que, es un lugar perfecto para la fuga de estos dos enamorados.
Para mí es siempre un placer enorme narrar una boda íntima o elopement estando de esta manera aún más unidos a ellos y formar parte como único testigo de su gran día.
La ceremonia comenzó alrededor de dos horas antes de la puesta del sol…, la gama de colores era impresionante y el sol de la tarde envolvía humilde todo con su luz dorada. Fue muy emocionante porque el momento había llegado…, y estos guapos enamorados intercambiaron votos a las puertas de una antigua capilla. Cada vez que vuelvo a pensar en este momento íntimo, emocional y mágico, sigo con la piel de gallina. Involucrarme en la planificación de la boda es otra cosa que realmente amo y estoy muy agradecidos por la confianza que mis parejas ponen en mí! No sólo en términos de la ubicación, flores o peinado y maquillaje, sino también en términos del momento perfecto del día.
También para la sesión de puesta del sol que siguió, Ro y Mikel confiaron en mi elección. Por supuesto, no quieres pasar todo el tiempo conduciendo y así que elegimos una ubicación cercana. Pero este lugar era una maravilla!!! Tuve que subir por un puente colgante con los recién casados y desde allí tuvimos la mejor vista a lo largo del rio Narcea.
Disfrutamos viendo el atardecer juntos. Todavía no puedo creer lo bienaventurada que soy por conocer a todas estas parejas de enamorados y capturar estos sentimientos tan puros…
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